En las nubes, Azorín reinterpreta la historia de Calixto y Melibea, dándole a la obra La Celestina un nuevo final. En su versión, los amantes no mueren, se han casado y viven felices junto a su hija Alisa.
Azorín nos habla, mediante la metáfora de las nubes, del eterno retorno. El tiempo pasa y las cosas se vuelven a repetir. Todo, forma parte de una gran rueda que gira y en las que las situaciones, los momentos y las vivencias vuelven, eternamente, a suceder. Para Azorín, nada tiene principio ni fin, todo vuelve a acontecer en el constante devenir del tiempo.
Que para hablarnos del eterno retorno, utilice a la pareja de enamorados de Calixto y Melibea no es una casualidad y, mucho menos, que su hija vuelva a vivir en el huerto una situación similar a la de ellos. Azorín nos quiere hacer ver que el amor siempre va a estar ahí. Que sean quienes sean los protagonistas siempre van a existir los comienzos de las historias de amor, los besos robados, las charlas eternas, las dudas, etc. Lo que siente Alisa, ya lo ha sentido antes Melibea y lo seguirán sintiendo todas las mujeres que se enamoren por primera vez.
"Calixto lo ve desde el carasol y adivina sus palabras. Unas nubes redondas, blancas, pasan lentamente sobre el cielo azul en la lejanía". Con esta frase final, Azorín nos da a entender que el padre sabe lo que está sucediendo en el huerto, porque él ya lo ha vivido con Melibea. Las nubes nos hablan de eterno retorno, de momentos y situaciones pasadas que se vuelven a repetir, constantemente, aunque cambien los protagonistas.
Azorín utiliza el amor como reflejo de lo que sintieron Calixto y Melibea, cuando se vieron por primera vez, son sensaciones y sentimientos que los podrán seguir sintiendo una pareja de jóvenes enamorados del siglo XXI. Las nubes son la metáfora que nos recuerda que no existe el presente, el pasado, ni el futuro, si no que todo forma parte de la gran rueda del Universo. Esta gira y nos lleva, continuamente, a vivir las mismas situaciones, los mismos sentimientos, a repetir, una y otra vez, las mismas historias.
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